Los organizadores de The Ocean Race están preparando su 14ª edición y lo hacen bajo unas condiciones que garantizan la seguridad y salud de sus trabajadores frente a la COVID-19. Para ello cuentan con el asesoramiento de Quirónprevención, servicio oficial de seguridad y salud de las últimas ediciones de la prueba deportiva más dura del mundo para equipos y expertos en prevención de grandes eventos deportivos.

Desde Quirónprevención se ha trabajado en la puesta en marcha de un plan de actuación para la reincorporación a la actividad en la oficina de The Ocean Race en el puerto de Alicante elaborado por expertos sanitarios y técnicos en prevención en el que se contemplan las medidas higiénicas, de distanciamiento interpersonal y organizacionales pertinentes para el buen desarrollo de la actividad de The Ocean Race.

El punto de partida en el desarrollo de este protocolo a medida para The Ocean Race ha sido la evaluación del estado inmunológico de todos los trabajadores que forman la organización mediante la realización de pruebas COVID-19.

A través de este seguimiento del estado de salud de sus trabajadores, The Ocean Race se propone evitar focos de contaminación y contagio, agilizando la respuesta ante una eventual aparición de casos o contactos estrechos con personas contagiadas en situación de riesgo.

Como apunta Johan Salén, Director general de The Ocean Race, "En un año esperamos estar celebrando una regata europea previa a la décimo cuarta edición que dará comienzo en 2022 y debemos adaptarnos a la nueva realidad cambiante que nos deja la pandemia, así como a interiorizar todas las medidas que nos ayuden a reducir las consecuencias del virus. The Ocean Race es una competición deportiva internacional, con escalas en seis continentes y de convivencia entre personas de todo el mundo. Todo lo que aprendamos ahora de la mano de Quirónprevención, nos ayudará a planificar esta gran regata oceánica conforme a los estándares más exigentes de seguridad frente a la COVID-19".